El primer paso es encender la parrilla a fuego medio y colocar la brasas por debajo.

Condimentamos el pollo deshuesado con sal y pimienta al gusto, y enseguida lo ponemos con cuidado en la parrilla con la piel hacia arriba, por unos 30 minutos.

Mientras tanto, vamos preparando la salsa base para la pizza.

Para ello, usaremos una sartén que también pondremos en la parrilla y rehogamos en aceite la cebolla hasta que tome un color transparente.

Añadimos el morrón picado y a los 2 minutos aproximadamente, agregamos los tomates. Ponemos un poco de agua si vemos que la salsa está muy seca.

Para condimentar la salsa, salpimentamos al gusto y añadimos el orégano y el ají molido.

Cuando hayan transcurrido los 30 minutos de cocción del pollo, le damos vuelta para que cueza por el lado de la piel.

Mientras, podemos ir armando nuestra pizza por el lado de la carne, que debe estar bien dorado.

Primero, cubrimos con la salsa toda el área de la carne, que quede bien extendida.

Luego, agregamos el jamón, el queso y las aceitunas.

Dejamos cocinar por unos 10 a 15 minutos más aproximadamente para que el queso se derrita. En este paso, aumentamos las brasas para un incremento de la temperatura.

Una vez listo el pollo, lo retiramos de la parrilla, agregamos los huevos duros y servimos.